Empezando la semana con mucha energía y felices de entregar a cada familia beneficiada los materiales para la construcción de las eco-estufas, poco a poco se observa como el volcán de arena desaparecía. Entre risas, sudor y muchas poses para las fotos, todos los voluntarios nicas y británicos ayudaban a las familias a empacar y cargar. Cada familia utilizaba distintos transportes para trasladar los materiales, mientras unos utilizaron camionetas rentadas, carretillas, otros traían sus caballitos o carreta jalada por bueyes. En fin, ni cuenta nos dimos cuando habíamos entregado los materiales a la última familia, y para cerrar el día con broche de oro, celebramos con los famosos choco bananos, y por fin pude respirar y decir todo salió bien.
Y se nos vino el día de construir las primeras eco-estufas, todos ansiosos de empezar, pero al mismo tiempo nerviosos de probar algo nuevo, o algo que ya no recordaba que hacer desde el ciclo pasado. Divididos en dos grandes grupos nos fuimos equipados a construir. Como era de esperarse la rivalidad entre ambos equipos empezó cuando llego nuestro experto en construcción Don Lester. Nuestro grupo hizo de todo para que el experto se viniera con nosotros primero para que nos diera indicaciones y así terminar antes, pero la batalla la perdimos porque Don Lester se fue con el otro equipo. Eso no impidió que nuestro líder de grupo nos dirigiera y nos asignara roles. Luego de tres horas y media todo salió bien. Los dos días siguientes hicimos más construcciones, pero con la diferencia que todos los voluntarios como decimos en Nicaragua habían ‘agarrado la onda’, y el trabajo se hacía un poco más fácil porque no teníamos que estar preguntando a cada ratito que hacer, y gracias a un rápido aprendizaje todo salió bien.
Para variar un poco, mientras unos trabajaban en las eco-estufas otros tenían que visitar las casas de las familias beneficiadas con árboles. Un día muy interesante ya que nuestro lideres tenían que cumplir con una misión en Estelí, Sam (voluntario Británico) y Xiomara (voluntaria Nica) fueron elegidos para ser líderes, derrotando así a la dictadura de Sergio Ortega y Amanda Murillo jajaja! Y una vez más después de mucho trabajo todo salió bien.
No puedo olvidar mencionar la deliciosa cena que Exania compartió con nosotros en celebración de su cumpleaños número 18, en donde por primera vez la mayoría de los voluntarios Británicos probaron arroz a la valenciana. Como dicen ‘barriga llena corazón contento’, otra semana más que hemos realizado un buen trabajo como equipo.
Escrito por la voluntaria de ICS Birmania Valerio
